Condicionamiento Clásico: Principios. El Perro de Pavlov



Hoy en día sabemos que las personas aprendemos a comportanos de una forma determinada debido a múltiples factores como: Factores Genéticos (que nos predisponen para parecernos en la conducta a nuestra familia) Procesos de Imitación (solemos hacer lo que se hace a nuestro alrededor o lo que vemos de nuestros ídolos) La influencia del Entorno (no nos comportamos igual en público que en privado), etc...

En ese sentido hoy vamos a hablar sobre el Condicionamiento Clásico, es decir, vamos a aprender cómo es el mecanismo por el cual aprendemos a predecir y por tanto aprender a comportarnos y a reaccionar de una forma determinada ante una situación determinada.

Efectivamente la palabra clave es Predecir. Si los animales y, por ende nosotros los humanos, no supiéramos predecir, no podríamos sobrevivir. Aprender a Predecir hará que sepamos que ante una cosa pasará otra. Ante una causa, pasará un efecto: Positivo o Negativo.


A esa forma de aprender que ante un estímulo vendrá una determinada respuesta, se le llama Condicionamiento Clásico.


Por ejemplo, si nos soplan a los ojos (estímulo), cerraremos los párpados (respuesta). Por ello, si vemos que nos quieren volver a soplar a los ojos, antes de que lo intenten, los habremos cerrado. Habremos aprendido a Predecir.

Ahora bien, también a través del condicionamiento clásico podemos aprender a reaccionar ante estímulos nuevos.
Por ejemplo, si vemos una luz roja en la pared y dos segundos después nos soplan en los ojos, a la segunda o tercera vez que veamos la luz roja, ya estaremos cerrando los párpados antes de que nos llegue el aire a los ojos.
Así habremos aprendido a predecir que: luz roja significa que me van a molestar, cuando anteriormente la luz roja no tenía ningún significado negativo para nosotros.

Y fue de esta manera cuando a principios del S. XX Ivan P.Paulov (1849-1936) estudió este modelo de aprendizaje. 


Simplificando el esquema del Aprendizaje Clásico o Modelo de Condicionamiento Clásico, este sería así:



 
                                            Ante un                      Estímulo                     hay una                            Respuesta

                                      Pero ante un        Nuevo Estímulo          podemos crear               la misma Respuesta
En el ejemplo anterior el Nuevo Estímulo (es la luz roja en la pared), que hacía que tuviéramos la misma Respuesta (prevenirnos y cerrar los párpados).



Y para los que quieran saber cómo es en realidad el esquema del Modelo Clásico, este sería así:




 
                                      Estímulo Incondicional (EI)            conlleva            Respuesta Incondicional (RI)
                                         Soplar en ojos                                                                               Parpadear

                                     Estímulo Condicionado (EC)            conlleva            Respuesta Condicionada (RC)
                                                            Luz roja                                                                                          Parpadear



Aunque nosotros lo hemos explicado con el ejemplo del parpadeo, Paulov estudió la capacidad de aprendizaje de la siguiente manera:


1.- Cuando introducía un trozo de carne en la boca de un Perro, este comenzaba a salivar inmediatamente.
2.- Mostraba al perro un estímulo neutro, por ejemplo el sonido de una campanilla (que no produce la actividad de salivación).
3.- Presentando repetidas veces el sonido de la campanilla, seguida del trozo de carne, observó que el perro comienza a salivar ante el sonido de la campanilla, antes de que aparezca el trozo de carne.



Por tanto ha habido un cambio en el comportamiento. Se ha creado una nueva conexión neuronal. Ahora con el simple sonido de la campanilla, el perro cambiará de actitud, es decir, que ante un estímulo al que antes no hacía caso, ahora reacciona.
El perro ha aprendido a predecir. En cierta medida se ha vuelto más “inteligente”. Ha aprendido a comportarse de una forma determinada ante una circunstancia determinada.


Bueno, ¿y qué significa todo esto? Pues como decíamos al principio del artículo:
Aprender a Predecir hará que sepamos que ante una cosa pasará otra.
Ante una causa, pasará un efecto: Positivo o Negativo.

El condicionamiento clásico es el típico aprendizaje de Acción-Reacción. No es la única forma de aprendizaje del ser humano como veremos otro día, pero sí un modelo esencial.

Veamos algunos ejemplos:
  • Si es la primera vez que un niño ve a un perro y este le muerde, aprenderá que los perros son “malos” y no querrá acercarse a uno, posiblemente en toda su vida. (Predecirá que los perros hacen daño).
  • Si un trabajador hace una tarea que antes no le daba importancia y ve que su jefe le premia con 50 € más en la nómina, este trabajador aprenderá que debe hacer la tarea más a menudo.
  • Estamos en el chalet de un amigo y escuchamos un ruido <plof>, no sabemos lo que es, pero la segunda vez nos daremos cuenta que es una manzana cayendo del árbol. Así, el sonido que en un principio nos daba igual, luego hasta nos hará reír.
  • Si un niño escucha el sonido de las llaves en la puerta, al principio no tendrá ninguna reacción, pero al cabo de varios días, si se produce a la misma hora, sabrá que es su padre que viene del trabajo.
  • En el instituto los alumnos escuchan el sonido de unos tacones, al cabo de varios días asocian el sonido de tacones a un profesor en concreto. Eso les hará reaccionar, para bien, o para mal, pero reaccionarán.

Al igual que el sonido de las llaves en la puerta, o el aroma de una colonia en el aire, al cabo de un tiempo asociamos algo, que en un principio no le dábamos importancia, a una respuesta por parte de nuestro organismo. La experiencia vivida ante ese estímulo será la que determine cómo reaccionemos. De forma positiva o negativa.

Mediante el modelo de condicionamiento clásico se pueden entender muchos tipos de miedos y fobias que mostramos en nuestra vida. Personas que muestran miedo a los pájaros, a los ratones, a determinados tipos de perros o a hablar en público, posiblemente tienen ese “problema” debido a que, por ejemplo, un día conocieron a un caniche que les intentó morder y ya aprenden (erróneamente) que los caniche son peligrosos de por sí.

Finalmente decir que el condicionamiento clásico es un modelo que nos ayuda a comprender cómo las personas aprenden (en el ámbito familiar, laboral o educativo) y por qué hacen lo que hacen. Además nos ayuda a entender que hacemos unas cosas cuando estamos en unos contextos y otras en otros, porque no reaccionamos igual ante el sonido de tacones de nuestra inflexible profesora que ante los sonidos de tacones de nuestra adorable madre.


Bibliografía:
Principios de Aprendizaje y Conducta, Michael Domjan. Universidad de Tejas.
Reflejos Condicionados: El legado de Pavlov (Sánchez, Sansa y García, 2003)